
La comida espacial para astronautas está especialmente preparada para sobrevivir en el espacio, considerando factores como la microgravedad, la necesidad de conservar la comida y el nutrir adecuadamente a los astronautas.
Algunos elementos clave de la dieta espacial son:
- Alimentos deshidratados:
La deshidratación (liofilización) reduce el peso y volumen, prolongando la vida útil de los alimentos. - Alimentos enlatados o envasados:
Se utilizan para proteger los alimentos y facilitar su almacenamiento y transporte. - Alimentos frescos (cuando es posible):
Aunque las frutas y verduras frescas se pueden llevar, se priorizan los alimentos de larga duración. - Alimentos «naturales»:
Frutos secos, galletas, barritas de cereales y otros alimentos sin preparación extra que se pueden consumir directamente.
En las naves espaciales se utilizan hornos para calentar algunos alimentos, como macarrones con queso o huevos revueltos. Algunos alimentos se rehidratan con agua antes de ser consumidos, como los espaguetis o las sopas.
Los astronautas pueden necesitar suplementos de calcio, vitamina D y otros nutrientes debido a los efectos de la microgravedad.
Se intenta ofrecer una variedad de alimentos para que los astronautas no se aburran y para que puedan elegir según sus preferencias.
No hay refrigeradores en el espacio, así que la comida espacial requiere preparación especial y deben ser preservadas para prevenir el deterioro, especialmente en misiones de largo tiempo.
Una de las comidas favoritas de los astronautas son las tortillas. Las tortillas gozan de
popularidad en el espacio por varias razones. Primero, son nutritivas. Las tortillas contienen una gran cantidad de carbohidratos que el cuerpo necesita para funcionar. Segundo, las tortillas son fáciles de almacenar porque son planas y no toman mucho espacio. Tercero, las tortillas son la comida espacial perfecta porque no producen migajas.
La comida suelta o que se desmenuza fácilmente puede flotar y contaminar el interior de la Estación Espacial Internacional o el transbordador espacial y puede convertirse en una molestia o peor, un peligro para la tripulación y el equipo. Por esto! las tortillas son fáciles de manipular en gravedad reducida y también se mantienen frescas por más tiempo que una rebanada de pan. Preparar un emparedado envuelto en tortilla es más fácil que usar dos rebanadas de pan, un atentado a los sandwiches tradicionales!
A diferencia de las tortillas de restaurantes, las de la NASA resisten el hongo, están
formuladas específicamente con menos agua que las regulares y se envasan en bolsas plásticas llenas de nitrógeno. Las tortillas que se llevan a la EEI tienen una durabilidad de dieciocho meses.